Tinta Roja

No marchen, no se arregla nada con marchas por la Paz

Aún recuerdo la histórica “Marcha por la Paz” celebrada en la CDMX hace algunos años, en la que participaron dos millones de personas, principalmente mujeres y niños, vestidos de blanco y llevando una vela entre sus manos, implorando PAZ. ¿De qué sirvió? De nada, fue peor, hubo mayor violencia y muertos.

Mientras toda esa gente perdió su tiempo, hizo gastos y terminó cansada de tanto caminar, en todo el país caían decenas de muertos y muertas, ejecutados, apuñalados, desaparecidos, asaltos, robos y lo que se acumule.

De qué sirvió el movimiento por “La Paz, Justicia y Dignidad” que inició el Poeta Sicilia en Cuernavaca; De Nada. ¿De qué han servido las marchas “Por la Paz” organizadas de buena fe por el Obispo Ramón Castro? De nada, lo mismo da que sea contra Graco o no. De Nada sirve marchar, tomar carreteras o parándose de cabeza, no es la solución.

La sociedad está podrida, hay algunas mentes criminales que son cada vez más violentos y crueles en contra de los inocentes, de los débiles, de los niños, de las mujeres y de masculinos. Ahí se ve, en noticieros de TV se aprecia, con cierto morbo, cómo matan a un muchacho de 15 años hincado y de espalda, dentro de una tienda asaltada, el niño no opuso resistencia no habló ni tampoco provocó al criminal, este solo lo mató porque así lo quiso, a sangre fría.

Ahí se ve, un tipo pide un bate en una tienda de deportes y con el mismo le rompe la cabeza a la dueña, sin motivo, al parecer cargó con unos pesos, fue violencia innecesaria, solo por matar, por dañar.

Brutal también, aunque no haya video, lo de la chica de 15 años a quien le partieron el corazón de una puñalada durante un asalto a Ruta 20 en el pueblo de Acatlipa el domingo anterior, solo para robarle un teléfono que una semana antes había sacado en abonos y para pagarlo tuvo que trabajar como doméstica en un casa rica.

No marchen, exijamos que cambien las leyes, que se vuelvan a exhibir a los delincuentes en los medios de comunicación, que se castigue a los asesinos, que los pongan a trabajar en las cárceles, quien no trabaje, no coma, como en USA, allá las cárceles no cuestan al Estado, en México la sociedad tiene que aportar 500 pesos diarios para mantener a un violador o asesino, para que coma a sus horas y tenga una estancia cómoda, con lujos y hasta servicios médicos, por las buenas, o por las malas, tal como quedó en evidencia con la matanza de empleados del Penal Femenil, que no accedieron a dar vida de princesa a una criminal y mataron a siete personas. O se cambian las leyes para que se vuelvan a publicar a los delincuentes, que se les castigue a ellos o a los Fiscales o Jueces que los dejan en libertad, que les corten los beneficios que gozan los malos y depredan a las víctimas, para que las cosas regresen a lo que fueron hace 30 años.

Que se castigue a los padres que no les hacen caso a sus hijos por estar pegados al celular, que se castigue a los mismos por dar tabletas o celular a niños menores de 10 años y que los “Derechos Humanos” beneficien a la sociedad y no sean protectores de los criminales. Se tenía que decir.

Lo dijo por su nombre: Coyotes

Por primera vez el mandatario del vecino país del norte llamó por su nombre al cáncer social que le está causando daño a su pueblo y está llenando de dólares los bolsillos de la mafia del poder y de traficantes de humanos en México, un mal que jamás se ha atacado y del que nunca se tienen noticias que haya un detenido o se hable del problema.

Si alguien cree que las caravanas de migrantes que utilizan como pasillo a México se trata de familias, mujeres y niños desplazados de su país por la pobreza o inseguridad, se equivocan, muchos de ellos son engañados y enganchados para ponerlos como “pared”, al frente del grupo, pero la mayoría cuenta con familia en USA y los que no, pagan de 3 a 5 mil dólares a los traficantes para que los crucen por México.

Mientras el Estado se preocupa por la corrupción de cuello blanco, nadie ha puesto atención a los reclamos del mandatario de los pelos güeros que ya no siente lo duro, sino lo tupido que su país se atasque con gente de todo el mundo, con el riesgo de contagios de enfermedades peligrosas, grupos delincuenciales o lacras que puedan causar grandes tragedias para un pueblo rico.

¿Qué queda ahora? Ya lo dijo el mandamás de USA, que México deje de aparentar ser un pasillo gratuito de migrantes, cuando en realidad hay un gran tapete de dólares que llenan las cuentas de la mafia del poder y particulares, que lo mismo pasan a personas que drogas, sin dejar de sospechar la colusión de gente del otro lado.

Por México no pasa uno solo gratis, eso se cree, pero no es así, todas las caravanas tienen un líder y van en grupos de 30 a 50 personas por cada traficante que se encarga de contratar autobuses, tráileres, casas para estancias pasajeras, evitar su deportación, ocupar los mejores lugares en los albergues y proveer de alimentos de buena calidad durante su traslado.

Ahí queda una prueba en las redes sociales cuando a una mujer, aparentemente humilde le ofrecen un plato de frijoles y los rechaza, luego, en su red social arremete en contra de los mexicanos, al asegurar que en su casa los frijoles se los da a los marranos, que ella come carne y mariscos, por lo que esta revelación la hizo “desaparecer” y a la semana posterior, aparece en USA, publicando en sus redes sociales los lujos que tiene en su lugar de origen en Honduras, casa de tres pisos, joyas y bolsos hasta de 20 mil pesos, pero además cuenta con VISA, por lo tanto, se sabe que dicha persona era traficante humana y durante su paso por México, se hospedó en los mejores hoteles.

¿Cómo se arregla la amenaza contra México? Combatir el tráfico humano y el Gobierno podrá ganar muchos millones de dólares al poner en subasta cientos de autos de super lujo, autobuses, tráileres y camionetas utilizadas para el transporte de migrantes, además, dejará de retacar a los gringos con tanta gente.

Recuperan camión de basura que robaron a comuna de Ocuituco

Un camión de volteo que habría sido robado de un inmueble en donde se resguarda el parque vehicular del Ayuntamiento de Ocuituco, fue recuperado por  la Policía de Investigación Criminal (PIC).

El camión fue robado de un inmueble situado en el Centro del municipio; tras la denuncia, los investigadores lo ubicaron en un taller de hojalatería y pintura en la carretera Cuernavaca-Cuautla de la colonia Casasano del municipio de Cuautla.

El dueño del lugar refirió que le fue entregado por  Ariel “N”, quien lo llevó con el apoyo de una grúa, persona que le encomendó realizarle reparaciones y modificar su apariencia. El automotor quedó a disposición del Ministerio Público para las diligencias correspondientes y posteriormente pueda ser devuelto a la alcaldía.