Tensión y conato de violencia en fraccionamiento que fue bloqueado

Tensión y conato de violencia en fraccionamiento que fue bloqueado
Conflicto entre condóminos de Santa Bárbara, de Cuautla, estuvo a punto de llegar a los golpes.
Tensión y conato de violencia en fraccionamiento que fue bloqueado

Debido a que sin previo aviso un particular o la empresa inmobiliaria que les vendió las casas, cerró la entrada y salida del fraccionamiento Real Santa Bárbara, ubicado en la colonia Santa Bárbara, al norte de la ciudad de Cuautla, los condóminos estuvieron a punto de llegar a los golpes, debido a que consideraron un abuso el tapar con piedras el lugar por donde circulan.

Una denuncia de parte de los colonos del fraccionamiento dio como resultado que los vecinos se pusieran en alerta debido a que sin darles aviso alguno, les taparon la entrada y salida del fraccionamiento, “cuando se supone que es un área de ‘paso de servidumbre’ y no se puede tapar así como así”.

Durante más de 4 o 5 horas los vecinos tuvieron que esperar a funcionarios de la Dirección de Obras Públicas, por permitir que se cerrara la entrada del fraccionamiento por un particular que presuntamente compró esa franja a la inmobiliaria. Indicaron que esa situación no se encontraba dentro de los contratos de compraventa que realizaron con la empresa.

La situación se iba poniendo tensa, hasta que llegaron los funcionarios de Obras Públicas del ayuntamiento de Cuautla, quienes según informaron si hay un contrato de compraventa de la franja que fue tapada, donde al parecer el particular construirá una barda, y con ello no les permitirá que pasen.

Además, se informó que conforme a la inmobiliaria la entrada y salida de los condóminos del fraccionamiento Real Santa Bárbara, es por la parte de atrás, lo que no fue aceptado por los colonos. Precisaron que debe de haber un permiso de parte de la dependencia del gobierno municipal para que se pueda hacer alguna obra.

Observaron que nadie les dio información alguna sobre el conflicto o la venta de dicha franja, además de que están pagando sus impuestos al municipio para que cuando menos “nos den información sobre la situación en la que se nos dejó, sin poder entrar a sus casas porque la entrada esta tapada con grandes piedras.