Sin pistas de los sujetos que mataron a dos policías
Francisco Javier Rendón 
Procedían del estado de Veracruz y de reciente ingreso a las filas de la policía Morelos, uno de ellos tenía menos de un mes de darse de alta y el otro entró en enero pasado, se desconoce si dejaron rencillas en su tierra natal Veracruz, donde también laboraban como policías, ya que hasta el momento ningún grupo criminal se ha acreditado la autoría de este ataque que al parecer fue por una evidente venganza y al parecer sus verdugos los vinieron buscando desde el estado sureño.
Fueron en total 90 los disparos de arma de fuego, los realizados por los responsables para dar muerte a los uniformados la noche del miércoles en la calle Juan de Alarcón esquina con Ignacio Allende de la colonia Atlacomulco en el municipio de Jiutepec; en el lugar personal de Periciales fijaron y embalaron los casquillos de armas de alto poder calibres AR-15. 223 milímetros, AK-47, 7.62 milímetros y ametralladora Browning Calibre .50 conocido como “mata policías”.
Lo anterior relacionado a la mortal balacera registrada a las 20:45 horas en el poblado de Atlacomulco, municipio de Jiutepec, donde fue interceptada una patrulla Dodge tipo Ram color azul de la Policía Morelos perteneciente al municipio de Jiutepec con número económico 00748 y en su interior los cadáveres de los uniformados; fueron cuatro los asesinos, dos a bordo de una camioneta y dos individuos más a bordo de dos motocicletas, quienes tras el mortal ataque se dieron a la fuga a toda velocidad con rumbo desconocido, en lo que aparentemente fue una clara venganza del crimen organizado.
Las víctimas fueron identificadas con los nombres de Misael y Germán, los cuales no tuvieron tiempo de echar mano a sus armas tras ser sorprendidos por una lluvia de balas desde tres frentes sobre una calle de terracería que va a salir a la Ex Hacienda de Cortés.
Los responsables se retiraron del lugar sin contratiempos, en tanto que la población pasó por una crisis nerviosa por la balacera que denominan espantosa, al asegurar que nunca habían escuchado tantos disparos de armas tan potentes usadas para matar a los uniformados en agresión directa con tintes de una emboscada.
En el lugar fue abandonada una de las dos motocicletas de los responsables, marca Yamaha con placas de Morelos 10ARB5, color blanca.
