Secreto a voces - Europa y España, ¿aprenderán que el cambio climático ya no es como estar esperando a Godot?

En opinión de Rafael Alfaro Izarraraz

Secreto a voces - Europa y España, ¿aprenderán que el cambio climático ya no es como estar esperando a Godot?

En diciembre del año pasado, se celebró la Conferencia Mundial del Cambio Climático (COP-25), en Madrid, España. Este evento como muchos otros, sirvieron para que políticos de la región mostraran su falta de conocimiento e insensibilidad sobre el asunto del cambio climático. No estaban preparados ni entendían del tema, pero sí mostraron disposición para cumplir con el protocolo de una reunión como si fuera un trámite cualquiera, en la que los acuerdos se trasladan a reuniones futuras y en donde, finalmente, por lo menos eso parece que creían, nada pasaría como, infelizmente, ocurre en eventos relativos al cambio climático desde que se iniciaron a nivel mundial en 1972.

Y no estamos hablando de cualquier tipo de personalidades. El presidente del Parlamente europeo, el, por cierto, de origen italiano, David Sassoli, acudió a la Conferencia del COP-25. Este hombre no sabe de cambio climático y, por supuesto, menos de los efectos que existen alrededor del mundo y que los políticos ignoran o no quieren darse cuenta por defender intereses de otro tipo. Esa incomprensión evidenció por qué ahora los italianos tienen un sentimiento de rabia hacia la Unión Europea y algunos no dudan en salir de inmediato de ella. En esa reunión expresó, según información emitida por los órganos de prensa del Parlamento, lo siguiente:

“Europa está lista para ejercer el liderazgo en la lucha contra el cambio climático” […] “Vamos a hablar con una voz única en la COP25 para defender objetivos ambiciosos y necesarios para lograr los resultados que nuestro planeta necesita. Europa jugará un papel significante, pero necesita que el resto de actores globales se sumen. Los objetivos ambiciosos han de ir acompañados por presupuestos ambiciosos. La transición hacia una economía de bajas emisiones de carbono debe ser justa y no dejar a nadie atrás” […] “El Parlamento Europeo reconoció la importancia sin precedentes de la amenaza a la que se enfrenta la humanidad. Hemos declarado la emergencia climática y hemos pedido que se tomen medidas urgentemente para combatir esta amenaza y contenerla antes de que sea demasiado tarde [el subrayado es nuestro]. Hoy llevo este mensaje al resto de líderes y les pido que hagan lo mismo” ((https://www.europarl.europa.eu/spain/es/prensa/communicados_de_prensa/pr-2019/12-2019/02122019.html).

Europa vive una de las peores catástrofes de su historia. Algunos la comparan con la Segunda Guerra Mundial, pero Robert Fisk (periodista inglés y especialista en guerras), nos ha ilustrado lo que es una guerra real y lo que ahora ocurre con el COVID-19. Fue mentira lo que dijo el dirigente del parlamente europeo. Europa no estaba preparada. La pandemia ha mostrado que no existe autoridad en Europa que se llame Parlamento Europeo, que durante la pandemia los países miraron por sus intereses antes que por la comunidad europea. Las acciones de pillaje entre los propios países europeos, por agenciarse los insumos médicos está suficientemente documentadas. No había inversión en infraestructura hospitalaria. Fueron rebasados en todos los sentidos, y sobre todo las naciones que supuestamente encabezan el proyecto

Por su parte, Pedro Sánchez, presidente en funciones, al inaugurar la Cumbre Ambiental, esto dijo:

hay que ir más lejos y hacer las cosas más rápido" en materia de emisiones ya que "o marcamos un punto de inflexión, o dejaremos atrás el punto de no retorno" […] “España está lista para dar un paso al frente" y va a "incrementar el ritmo de reducción de emisiones comprometido para el año 2030" […] "el progreso, si no es sostenible, no se puede llamar progreso" y depende del hombre "reparar el daño causado": "Tenemos los medios y la técnica para poder hacerlo posible". Sánchez ha subrayado que hoy en día "solo un puñado de fanáticos niegan la evidencia" del cambio climático y que, llegados a este punto, "no hay más alternativa que actuar con hechos, con acciones". Que: "La batalla contra la emergencia climática -ha asegurado- requiere de coraje y determinación, solidaridad y liderazgo y, sobre todo, de hechos: pasar de las palabras a la acción". Y, concluyó que: “se trata de un reto que nos afecta a todos, ya que no hay muro lo suficiente alto que proteja de esta amenaza a ningún país, por poderoso que sea, y el momento de la respuesta es ahora", ha advertido Sánchez (https://www.tuotrodiario.com/noticias/2019120284590/pedro-sanchez-cumbre-clima-reduccion-emisiones/).

Y, efectivamente, no hubo muro lo suficientemente alto que protegiera a España de los efectos del cambio climático, la pandemia que ahora se vive y que se manifiesta por la presencia del multiconocido virus. La razón, su comprensión fue lenta en lugar de rápida, porque el progreso al que empuja su país no es sustentable y, por tanto, no es progreso porque no es verdad que cuente con la técnica para hacer posible el desarrollo sustentable. El 2 de mayo, dice en un twitter, luego del inicio del relajamiento de las medidas sanitarias que dejaron más de 25 mil muertes: prudencia y responsabilidad” de los ciudadanos para que respeten las normas establecidas y evitar un nuevo aumento de la propagación de la enfermedad, porque “el virus sigue ahí”.

Y siguen sin comprender que la pandemia y el cambio climático son dos caras de una misma moneda, que atentan contra la salud. La reunión del COP-18 en Qatar, celebrada en 2012 tuvo como preocupación la necesidad de acciones gubernamentales de las naciones con el fin de que el clima del planeta no se incremente 2 puntos porcentuales, cuya línea representa un punto de no retorno (como dijo Sánchez, pero sin comprenderlo a cabalidad), que ocasionará graves consecuencias al planeta. El COP-25 trasladó el tema más importante, los acuerdos sobre el manejo de los Gases de Efecto Invernadero para la conferencia de Glasgow de 2020. Qué curioso, después del fracaso del encuentro, viene la pandemia que nos tiene en cuarentena en todo el mundo (ver Gonzáelz, Yamilé, et. al., (2013). El cambio climático y los efectos de salud. En: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1561-30032013000300011).

Las autoras dicen que en los últimos cien años la temperatura del planeta se ha incrementado en 0.75 °C, pero que las últimas décadas se ha acelerado en 0.18 °C. Esto apuntan: “Los cambios del clima a largo plazo influyen en la salud y la viabilidad de todos los ecosistemas, con afectación para la distribución de plantas, los agentes patógenos, los animales e incluso los asentamientos humanos .. Los cambios extremos en la temperatura ambiental, la precipitación, los vientos, el aumento en la frecuencia de eventos climatológicos extremos como inundaciones y sequías, tienen efectos en la distribución y en la incidencia de enfermedades .. Un individuo sano tolera una variación de su temperatura interna de 3 ºC. Por encima de 37 ºC se produce una reacción fisiológica de defensa, y las personas en edades extremas de la vida son las más susceptibles a estos cambios. En las personas que padezcan enfermedades crónicas, tratamientos con diuréticos e incapacidad del centro termorregulador para adaptarse, pueden ocasionar cambios en su metabolismo, con la aparición de sintomatologías como: calambres, deshidratación, insolación, golpe de calor e incluso si las temperaturas persisten altas más de 3 días puede llevar a la muerte”.

El cambio climático ya está, no es como esperar a Godot.