Presionan para eliminar unicel, popote y plástico en Morelos
"Mi Ciudad" urgió al Congreso para impulsar reformas a la Ley de Equilibrio Ecológico
Juan Lagunas 
"Mi Ciudad", junto con otras organizaciones, urgieron al Congreso local para que impulse reformas a la Ley de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, con el fin de eliminar –“definitivamente”- los siguientes elementos: unicel, plástico y popote.
En conferencia de prensa, explicaron que el estado atraviesa por una “crisis ambiental”, como en el resto del orbe, por lo que se deben tomar acciones de esta naturaleza. El calentamiento global es un hecho “determinante”; la tendencia es el cambio en la temperatura.
En específico, propusieron modificar tres artículos: precepto seis: que se establezca la no utilización de popotes y unicel. Que se haga un programa de auditoría ambiental y, en su caso, estimular a las empresas que se apeguen a las normas. Precepto siete: que el Ejecutivo haga una labor de acompañamiento. Precepto ocho: involucrar a los municipios. Que éstos estén acordes a las iniciativas.
En ese sentido, agregaron que es preciso que las 36 comunas signen convenios de colaboración con la Secretaría de Desarrollo Sustentable y, al mismo tiempo, que se estructuren reglamentos en materia del cambio climático. Esto podría concretarse a partir del primero de enero del 2021. En tanto eso sucede, coincidieron en que se debe hacer una campaña de difusión, con el objetivo de propiciar la participación ciudadana.
Reiteraron la necesidad de acelerar una interlocución con la 54 Legislatura, a efecto de tomar “medidas pertinentes” en contra de los embates de la polución. Dijeron que, de acuerdo al Centro de Derecho Ambiental Internacional, estos materiales “dañan, en gran medida”, por sus “altos contenidos sintéticos”. El combustible fósil contribuye, del mismo modo, a acrecentar el efecto invernadero.
Externaron que el PVC y el unicel causan patologías en el hombre, como cáncer y otros tumores. Por ejemplo, los microplásticos “están en todo el mundo”: en las lluvias y en los bosques… “En el agua que tomamos”. Se han acumulado más de ocho mil millones de toneladas de estos materiales.
Auguraron que, en 11 años, habrá más sequías: ratas, precipitaciones pluviales atípicas, dióxido de carbono, plagas. La calidad del aire se deteriorará. Se desencadenarán “más partículas dañinas”, que, a la par, pondrán a “un millón de especies en peligro de extinción”.
