Mantiene el Ejecutivo vigilancia de penales: Israel Hernández
Pese a que reitera la presencia de autoridades federales, tras de que reo perdiera la vida; fue rechazada
En suma, entre el 2019 y lo que va de este, al interior del Cereso han fallecido más de 15 personas
Juan Lagunas 
Sobre los hechos acontecidos -durante el fin de semana- en el penal de Atlacholoaya, donde un reo perdió la existencia, el ombudsman del estado reiteró la presencia de autoridades federales; empero, esto fue rechazado.
De igual forma, se asentó que el centro de reinserción continúa bajo el mismo esquema; es decir, el estado es responsable de “salvaguardar la salud, integridad y vida de las personas privadas de la libertad, personal administrativo, de seguridad y custodia, así como de la sociedad en general”.
Ante eso, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos, Israel Hernández Cruz, rememoró que el año pasado se registró una serie de “acontecimientos violentos” en el denominado CERESO Morelos; el último de éstos fue el 19 de marzo del año en curso, por el que perdieron la vida al menos tres presos.
Por lo que, en suma, entre el año pasado y lo que va del presente, al interior de ese centro han fallecido más de 15 personas; tres de las cuales, presuntamente por suicidio.
A su vez, informó que el 28 de enero 2020, este organismo dio a conocer el Diagnóstico Estatal de Supervisión Penitenciaria 2019 (DESP2019), a través del cual hizo público las condiciones que se viven al interior de esos espacios. Se avaluaron cinco aspectos: 1. Aspectos que garanticen la integridad física, psicológica y moral de las personas privadas de la libertad; 2. Aspectos que garanticen una estancia digna; 3. Condiciones de Gobernabilidad; 4. Reinserción Social de la Persona Privada de la Libertad, y 5. Grupos de personas privadas de la libertad en situación de vulnerabilidad. Destacando que el Centro de Reinserción Social “Morelos” obtuvo una calificación reprobatoria de 4.87; siendo observados como puntos de mayor riesgo: la sobrepoblación, la falta de personal y custodia, los deficientes servicios de salud con los que se cuenta, la falta de actividades laborales y de capacitación, así como las condiciones de desigualdad que se viven al interior.
Por lo anterior, la CDH lamentó que estas circunstancias siguen poniendo en evidencia la urgente necesidad de adoptar una estrategia más efectiva para el control y la seguridad de todos esos lugares.
