Carente Morelos de liderazgo que devuelva la dignidad a campesinos

Atraviesa el campo morelense de abandono hace años, lo que ha provocado la incertidumbre del sector que no cuentan con un liderazgo efectivo que abandera sus causas, aseguró Dante Aguilar Domínguez, catedrático investigador del Instituto de Ciencias de la Educación (ICE) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) al hacer referencia que la entidad debería ser referente por la lucha de reales representantes como Emiliano Zapata.

Sostuvo que a cien años de la muerte del general revolucionario Emiliano Zapata, “estamos en una especie de giro en el que no somos capaces de poder concebir un liderazgo social que nos permita recobrar otra vez la dignidad como morelenses y que el campesinado necesita”, todo se está transformando de manera precipitada, dijo, en donde la “descampesinización” y el abandono de la vida rural es cada vez más fehaciente, más palpable y parece irreversible, agregó el oriundo de Anenecuilco.

De acuerdo con investigaciones sociales, la “descampesinización” es un proceso a través de disminución de la propiedad familiar de subsistencia que no emplea mano de obra contratada ni necesita completar sus ingresos con trabajo asalariado fuera de la propiedad y el colonato.

Este proceso es casi involuntario que ocurre cuando las fuerzas económicas del mercado empiezan a deshacer al campesino utilizando sus recursos industriales volviendo al campesino una persona con buen ingreso so pretexto de desarrollar medios agroindustriales que socaven el antiguo proceso de mantenimiento.

El historiador, Dante Aguilar, señaló que la de Emiliano Zapata es una historia  que se presenta como un monumento y no como un hombre, líder comprometido con la sociedad, por lo que lo que, dijo, hace falta dar mayor énfasis a los estudios regionales de la Revolución Zapatista en distintas zonas de México y revisar distintas acciones insurgentes en otros lugares del continente americano.

“Los historiadores aportaron un aspecto crucial en los orígenes del zapatismo, el origen de clase social al cual pertenecieron los primeros cuadros dirigentes de la Revolución del Sur, en su mayoría fueron pequeños propietarios rancheros del estado de Morelos”.

El investigador del ICE, consideró complicado en la actualidad establecer la vigencia de los ideales de la Revolución Zapatista, por el contexto en el cual nos situamos hoy día, al referir que se ha mitificado en la estatua de bronce, “donde nos han querido mostrar a un Emiliano Zapata como monumento, y se olvidan que fue un habitante más, un morelense de carne y hueso, un hombre con virtudes y desventajas, que fue acompañado por hombres en su mayoría pequeños propietarios, rancheros de los pueblos de Morelos”.

Dante Aguilar, comentó que una de sus líneas de investigación es referente a las consecuencias y las secuelas de los grupos armados que surgieron después de la llamada unificación revolucionaria después de 1919, porque una revolución como la revolución del sur, la revolución zapatista, dijo, “va más allá de una cronología breve”.