Al alza, deserción escolar en México y Morelos por el covid
En más del 500 por ciento aumentó la deserción escolar en México, informó el INEEA
Principalmente se agravó entre estudiantes del nivel básico, secundaria y primaria
Jorge Rafael Sánchez 
Cuautla, Mor.- En más del 500 por ciento aumentó la deserción escolar en México debido a la pandemia del covid-19, dio a conocer el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEEA), principalmente de estudiantes del nivel básico, secundaria y primaria. En Morelos el porcentaje es prácticamente el mismo, ya que en una lista de espera de 200 solicitantes ahora es de más de mil.
Según los datos, el problema se debe a que la mayoría de esos jóvenes no cuenta con los recursos económicos para poder continuar sus estudios de manera virtual, tomando en cuenta en que requieren de un equipo de televisión o Internet, para poder conectarse a clases. Explicó que los mismos jóvenes solicitantes a ser tomados en cuenta por el INEEA para poder seguir sus estudios, le dijeron que les era imposible poder acceder a clases virtuales.
Al respecto, la dependencia destaco que ellos no imparten clases a través de medios virtuales, “estaríamos cayendo en el mismo problema que provocó la deserción escolar de los jóvenes, por lo que ellos tendrán que esperar hasta que pase la pandemia de coronavirus”. Indicó que se teme que el número de deserción aumente en el próximo semestre, porque los mismos padres, se han quejado de que no pueden continuar con el mismo sistema.
Según dato proporcionados por maestros, hay un gran número de deserción escolar porque no se programó un ciclo escolar en donde los padres serían los colaboradores de los profesores en cada una de las materias que cursan los estudiantes. Observaron que ellos mismos no saben qué hacer, porque hay un choque entre la enseñanza de la Secretaría de Educación Pública y las evaluaciones que ellos hacen.
“No se quiere reconocer que el sistema virtual se tomó de última hora y sin ninguna planeación de parte de la SEP, lo que afectó primero a los alumnos, a los padres de familia y después a los maestros, porque “aun hoy no se entiende que estamos haciendo”. Observaron que mientras en televisión se lleva un supuesto orden, a ellos los obligan a hacer sus propias evaluaciones por medio de guías que deben de elaborar.
Además, dijeron que otro conflicto es que en algunos casos, sino es que en la mayoría, los cursos virtuales llegan a ser muy tarde, lo que obliga a los padres de familia a tratar, conforme pueden, de enseñar a sus hijos, aun cuando ya se encuentran cansados por la labor que desarrollaron durante el día.
